Las sorprendentes propiedades de algunos materiales suelen estar acompañadas de un alto precio, bien porque es un material muy raro, o muy complicado de obtener. El titanio entra en este grupo, pero un grupo de científicos ha encontrado una alternativa igual de ligera y resistente, pero a un 10% de su precio.

El nuevo material, cuyo descubrimiento se acaba de publicar en la revista Nature, está compuesto de una aleación de dos elementos abundantes y de sobra conocidos: Hierro y aluminio. La clave está en la manera en que el equipo de investigadores de la Universidad de Ciencia y Tecnología Pohang, en Corea del Sur, los han combinado.
Hasta ahora, el hierro y el aluminio se han combinado con frecuencia para obtener una aleación casi tan resistente como el hierro, y casi tan ligera como el aluminio. Desgraciadamente, esta mezcla también es un poco quebradiza. A veces se le añade manganeso para mejorar ese problema, pero el material resultante sigue siendo poco apto para sectores como la automoción o la aeronáutica.
En vez de manganeso, lo que han hecho en Pohang ha sido añadirle níquel. La diferencia se produce a escala nanométrica. El níquel reacciona con las moléculas de aluminio y hierro formando unos cristales de apenas unos nanómetros denominados cristales B2. Las estructuras aumentan de forma dramática la resistencia mecánica de la aleación hasta el punto de ponerla a la altura del titanio en cuanto a durabilidad y densidad.
Según explican en The Economist, la proporción de materias primas utilizada también supone un coste de una décima parte de lo que cuesta actualmente producir titanio. ¿El problema? En realidad es uno pequeño. El material se ha creado y testado en laboratorio, Ahora toca diseñar un proceso para fabricarlo en grandes cantidades. Posco, que es una de las grandes multinacionales de producción de acero, comenzará este mismo año las pruebas para su producción. [Nature vía The Economist]
Foto: Cristales de titanio vistos al microscopio. Tomatito / Shutterstock
Fuente: gizmodo