El hábito hace al maestro. Este conocido refrán también se aplica a los trabajos de soldadura. No obstante, si quieres saltarte algunos pasos y conocer desde hoy cómo terminar una soldadura como un verdadero experto, sigue los siguientes consejos.
Cómo terminar una soldadura para que quede perfecta paso a paso
Deja enfriar el material
Después de terminar la soldadura propiamente dicha, es importante que dejes enfriar el material antes de realizar cualquier arreglo posterior. Si estás haciendo soldaduras por primera vez y solo quieres coger mayor destreza, puedes meter el metal en agua para que se enfríe de forma más rápida. Pero si lo que quieres es conseguir una soldadura que no sea quebradiza y que resulte duradera, lo mejor es dejar enfriar el metal al aire.
Ahora limpia toda la escoria que puedas
Una de las formas más claras de demostrar que sabes cómo terminar una soldadura correctamente es quitando toda la escoria que puedas. Este paso es fundamental si quieres conseguir una soldadura limpia y sin restos. La escoria cumple una función primordial, que es la de protección del hilo de soldar. Pero tras la soldadura se debe retirar con la ayuda de un martillo.
Debes tener en cuenta que, aunque no necesites la pantalla de soldar en este paso, sí que te resultarán útiles las gafas como medida de seguridad, ya que los restos que se desprendan pueden dañarte los ojos.
Por otra parte, ten en cuenta que no debes golpear demasiado fuerte (puedes dejar marcas en la soldadura) ni demasiado débil (no se desprenderá toda la escoria). Si algún resto queda suelto, utiliza un cepillo metálico para retirarlo.
Revisa una última vez el trabajo
Echa un último vistazo a la soldadura. Si necesitas darle un repaso porque ha quedado algún hueco, dale otra pasada. Así tendrás garantías de que el material será resistente.
¡Et voilá! Ya sabes cómo terminar una soldadura como un auténtico maestro. Ahora… ¡pasa a la práctica!