Las cenizas volcánicas causan severos daños a los motores, abrasión en las ventanillas, fuselaje y superficies aerodinámicas de la cabina de la tripulación de vuelo, tapan el sistema de Pitot estático, penetran en los sistemas de aire acondicionado y de enfriamiento del equipo y contaminan los equipos eléctricos.

Las cenizas volcánicas son peligrosas para la seguridad aérea por su "grave" influencia en el funcionamiento de los motores de los aviones, según ha explicado este jueves el secretario general del sindicato de pilotos Sepla, José María Iscar.
"Son tan peligrosas por su poder abrasivo, pueden lijar el avión y tener una grave incidencia en el funcionamiento de los motores de las aeronaves llegando a pararlos. Además, vienen asociadas a gases con una base de azufre muy perjudicial", explicó en declaraciones a Telemadrid recogidas por Europa Press.
Además, con la tecnología actual los pilotos no son capaces de detectar una nube de estas características sino es con la vista.