El nuevo material presentado es un polímero con capacidad de conectar el tejido humano con el computador.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Delaware presentó un nuevo recubrimiento de polímero biocompatible que podría ayudar a que los dispositivos se fusionen mejor con el cerebro.
Un problema importante con la implantación de cualquier tipo de dispositivo en el cuerpo son las cicatrices. Los materiales como el oro, el silicio y el acero tienden a dañar el tejido cuando se implantan. Es por eso que David Martin, decano asociado de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Delaware, y sus colegas han pasado años estudiando un polímero llamado poli (3,4-etilendioxitiofeno) o PEDOT.
PEDOT ya ha ayudado a mejorar el rendimiento de los implantes médicos al reducir la impedancia sin causar cicatrices excesivas. Martin y sus colegas han estado trabajando en la especialización de PEDOT para permitir funciones únicas. Recientemente, el equipo agregó un anticuerpo al polímero que puede detectar cuándo un tumor ataca las hormonas de crecimiento de los vasos sanguíneos, una tecnología que podría servir como una herramienta de diagnóstico innovadora en el futuro.
Al ajustar los recubrimientos poliméricos de manera similar, científicos como Martin podrían ayudar a avanzar en el campo de las interfaces cerebro-máquina. El equipo espera investigar a continuación cómo se comportan estos polímeros especializados en los organismos vivos.
Fuente: bigthink