En primer lugar, cabe recalcar que no es necesario precalentar la mayoría de aceros inoxidables austeníticos serie 300. El metal base debe estar en temperatura ambiente, entre 15 a 23°C. Es necesario precalentar el metal cuando se unen metales gruesos o que contengan un alto porcentaje de carbono. Una buena técnica de soldadura se desarrolla mientras ganas experiencia. A continuación te brindamos algunos consejos para que puedas mejorar tus técnicas:
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Utiliza equipos o accesorios para mantener el trabajo en su lugar.
Los bordes de corte deben ser cuadrados.
Las planchas y placas de calibre más pesado pueden requerir un borde biselado para asegurar una penetración completa.
Obtén un blindaje adecuado, centrando al metal de relleno en el área del gas y del charco.
El metal de relleno se debe sumergir en el charco de soldadura, pero no debe gotear en él.
Mueva la pistola a lo largo de la unión a una velocidad constante para así mantener la uniformidad
Sostén la pistola sobre la soldadura hasta que se detenga el gas. De esta manera mantendrás el trabajo protegido.
Puede necesitarse de un calentamiento posterior para “aliviar” las tensiones internas causadas por la concentración de calor en el área de la soldadura. Este calentamiento ayuda a ralentizar el proceso de enfriamiento para minimizar el agrietamiento. Este pequeño proceso es recomendable cuando se utilizan uniones gruesas de metal. Recuerda nunca trabajar en un lugar cerrado o con poca ventilación. El humo provocado por este proceso resulta dañino para la salud.